- Sofia Vergara
No es muy común que algunas de las mujeres más famosas del mundo se reúnan alrededor de una mesa redonda para nuestro deleite, pero Nicole Kidman, Naomi Watts, Jennifer Aniston, Jodie Foster, Sofia Vergara, Brie Larson y Anna Sawai estuvieron en la Mesa Redonda de The Hollywood Reporter sobre las actrices dramáticas de los Emmys.
En esta fascinante charla élite, las mujeres hablaron de todo, desde envejecer en Hollywood hasta qué emojis no pueden dejar de usar. Escuchar a actrices hablar sobre sus carreras ante las cámaras no es nada nuevo, pero ver la gran química que hay entre estrellas mientras se relajan con una bebida, es bastante raro. Esto es lo que aprendimos:
El mundo es de Nicole Kidman y simplemente todos vivimos en él
Cada grupo de mujeres tiene una abeja reina, pero con tantas estrellas de élite en una sala, estaba por verse qué actriz icónica estaría a cargo.
Rápidamente se hizo evidente que Kidman, de 56 años, es la reina, pero con una calidez y ligereza que muestra al instante lo diferente que es a algunos de sus papeles más intimidantes. Mostrando mucho afecto tanto por Watts, de 55 años, su compatriota australiana y amiga cercana desde hace, ¡vaya!, 40 años, como por Aniston, de 55 años, con quien trabajó en la comedia romántica ‘Just Go With It’ en 2011, además de trasmitir mucha sabiduría y calidez a sus colegas más jóvenes, Kidman es el pegamento que une al grupo.
¿Quién diría que Kidman es exactamente la mujer que necesitas en la sala para romper el hielo en uno de esos incómodos escenarios en el trabajo, o para avisarte sutilmente de que tienes labial en los dientes?
Incluso las grandes estrellas luchan contra el síndrome del impostor
Es difícil saber si sentir alivio u horror al saber que incluso Sofía Vergara, de 51 años, sufre del síndrome del impostor. Vergara podría ser una de las mujeres más bellas del mundo, adorada mundialmente por su papel como la icónica Gloria en Modern Family y muy respetada por haber asumido su rol más reciente en Griselda, pero admite que todavía se siente perdida en comparación con muchos de sus colegas.
“Me siento muy incómoda aquí porque este es mi grupo de actrices favorito, y me doy cuenta de que no sé nada sobre la actuación”, comentó la actriz colombiana, para horror de Aniston, quien sabe una par de cosas de cómo pasar de actriz cómica a estrella seria.
Vergara piensa que es su fuerte acento colombiano lo que la hace luchar para evitar ser encasillada. “Cuando decido hacer algo diferente, es difícil porque este acento es hermoso, pero es como, no puedo ser científica, no puedo ser astronauta”, expresó.
Sofía, lo estás haciendo de una forma brillante, y estamos ansiosos por verte en ese papel de astronauta, ¡y no solo por los posibles looks!
Toda noche de chicas termina con una conversación de un tema hormonal
Cualquiera que haya salido con un grupo de mujeres, de cualquier edad, sabe que siempre se llega un punto en la noche donde la conversación gira en torno a temas hormonales, ya sea hablar sobre problemas de fertilidad, rabia, perimenopausia o simplemente quién tiene el peor SPM.
Y efectivamente, al final de la charla, Watts habló sobre sus luchas durante la menopausia, algo sobre lo que se mostró muy apasionada, que incluso fundó una compañía del cuidado de la piel, Stripes, para mujeres en la mediana edad.
“Cuando estaba al borde de querer empezar una familia, tenía 36 años, y me dijeron que estaba cerca de la menopausia,” explicó. “Entré en pánico frenético, mucha vergüenza y miedo. Estoy omitiendo mucho, pero pude tener hijos y luego entré directamente en la menopausia con síntomas intensos a principios de los 40″.
Watts tiene dos hijos, Sasha, nacida en 2007, y Kai, nacido en 2008, con Liev Schreiber, de quien se separó en 2016, antes de casarse con su coprotagonista de Gypsy Billy Crudup en 2023.
La nominada dos veces al Oscar, ahora está en una misión para romper los tabúes alrededor del difícil período de la vida por el que toda mujer pasará. “Sentí que si alguna vez me atrevía a mencionar esa palabra, sería etiquetada como redundante, acabada, destinada al olvido”, admitió. “Sería un suicidio profesional traer eso a la sala. Pero luego pensé, ‘Esto no tiene sentido. Somos la mitad de la población. Todas vamos a entrar en la menopausia en algún momento, así que ¿por qué no deberíamos hablar de ello?’”
Está bien mentir (un poco…) para conseguir un trabajo
¡Manos arriba si alguna vez has añadido un idioma o dos a tu perfil de LinkedIn y que realmente no has hablado desde la secundaria, o escrito en tu currículum que eres “proficiente en diseño gráfico” porque una vez ayudaste a tu mejor amigo a diseñar la invitación de su fiesta de cumpleaños… ¡no estás solo!
La mayoría de las actrices en la sala admitieron que han dicho algunas mentiras piadosas, ¿o pequeñas grandes mentiras?, para entrar en la sala de audiciones. “Todos mentimos y dijimos que sabíamos montar a caballo, y no pudimos”, dijo Larson, de 34 años, entre risas.
La diferencia es que a las estrellas de élite se les recompensa con dobles de acción cuando se descubre que no son tan increíbles patinando sobre hielo o montando monociclos después de todo… el resto de nosotros simplemente tenemos que descargar Duolingo en pánico para disimular.
Es oficial: las actrices famosas no se odian entre sí
Obviamente, es mucho mejor chisme pensar que las grandes estrellas están todas enfrentadas entre sí, pero en realidad, parece que este grupo, y muchas de sus contemporáneas, se brindan enormes cantidades de apoyo, en parte porque, cuando algunas de ellas comenzaron, Hollywood era muy machista.
“A lo largo de los años, he hecho un esfuerzo por hacerme amigas de otras mujeres en la industria, porque generalmente solo había una mujer en un trabajo”, dijo Larson. “Era solo yo, y hay cosas que me incomodan o cosas que me gustaría cambiar o de las que quisiera reírme, y conectar con otras mujeres ha marcado la diferencia porque puedes intercambiar historias”.
Estaba claro que, aunque algunas del grupo se conocen mejor en la vida real que otras, había un afecto y respeto genuinos entre ellas. De hecho, incluso hablaron sobre cómo Jodie Foster, de 61 años, remplazó a Kidman en Panic Room en 2002 cuando estaba pasando por un momento difícil. ¡Hurra por las mujeres que apoyan a otras mujeres!
Envejecer en Hollywood no tiene que ser deprimente
Las mujeres en la mesa redonda iban desde Anna Sawai, de 31 años, estrella de Shogun, hasta Foster, de 61 años, estrella de un sin número de películas, era la mayor del grupo, en lugar de aquellas cuyas estrellas aún están en ascenso, quienes parecen estar más seguras de su lugar en Hollywood.
“Tengo que decir, nunca fui tan feliz en mi rol de actriz como cuando cumplí 60″, reveló Foster. “Hay una especie de satisfacción al respecto en que no todo gire alrededor de mí y poder entrar a un set y decir: ‘¿Cómo puede mi experiencia o cualquier sabiduría que tenga servirte?’. Traer eso a la mesa, no solo es más divertido y liberador, sino también fácil. Es súper fácil porque no estás lleno de esa ansiedad que sienten los más jóvenes”.
Y Aniston resumió el mismo sentimiento un poco más breve. “Simplemente creo que cuanto más viejo te haces, más ‘me importa un carajo’”, aseguró.
Foster también reveló que es una especie de mamá gallina secreta en Hollywood, y a menudo se acerca a las nuevas estrellas que le preocupan. “Supongo que me considero algo así como una figura materna”, expresó. “Si veo a alguien borracho y caído en un evento, por ejemplo, puede que le diga: “Entonces, ¿qué pasa?”. Porque siento que me importan y realmente estoy agradecida por mi madre que me ayudó a superar todo eso. De alguna manera, logré tener una serie de reglas que me permitieron sobrevivir”.
Brie Larson no recibió el memo sobre el emoji que llora de la risa 🤣
Al final de la mesa redonda, se les preguntó a las damas cuál es su emoji más utilizado, y mientras Foster dijo que el suyo es el payaso, Kidman optó por el beso, Larson comentó que ella siempre recurre a la cara que llora de la risa. Sí, el mismo emoji que la Generación Z canceló hace unos años porque aparentemente es solo para personas mayores.
Seguramente si una superhéroe de 34 años lo usa, todavía es cool después de todo, ¿verdad? ¡Sí!
